La salud bucal en gatos es un aspecto fundamental del bienestar felino que muchas veces pasa desapercibido. Así como los humanos necesitan cepillarse los dientes a diario, los gatos también requieren cuidados dentales regulares para prevenir enfermedades como la gingivitis, el sarro, la halitosis e incluso problemas sistémicos que afectan órganos como el corazón o los riñones.
El cepillado dental en gatos puede parecer una tarea imposible, especialmente si tu gato no está acostumbrado. Sin embargo, con paciencia, amor y la técnica adecuada, es completamente posible lograr una rutina efectiva y libre de traumas. A continuación, te presentamos una guía paso a paso para introducir el cepillado dental de forma suave y positiva.
El 70% de los gatos mayores de 3 años presentan algún grado de enfermedad periodontal. Esta condición no solo provoca mal aliento, sino que puede causar dolor, pérdida de dientes e infecciones graves. Por eso, el cepillado dental regular es una herramienta esencial para prevenir problemas y mantener la salud dental felina en óptimas condiciones.
Lo ideal es cepillar los dientes de tu gato todos los días, pero si eso no es posible, hacerlo al menos tres veces por semana puede marcar una gran diferencia. Además del cepillado, existen opciones complementarias como enjuagues, golosinas dentales o alimentos diseñados para reducir el sarro, pero nada reemplaza el cepillado con cepillo y pasta dental específica para gatos.
Complementa tu conocimiento felino con: Cómo prevenir problemas de comportamiento en gatos con un buen enriquecimiento ambiental
Busca un lugar tranquilo y sin distracciones. Evita hacer el cepillado cuando tu gato esté estresado o muy activo. Puedes colocarlo sobre una superficie cómoda o en tu regazo, siempre asegurándote de que se sienta seguro.
Utiliza una pasta dental para gatos, nunca uses pasta dental humana. Estas fórmulas están diseñadas para ser seguras en caso de ingestión y suelen tener sabores agradables como pollo o pescado. También necesitarás un cepillo de dientes especial para gatos o un dedal dental.
Durante los primeros días, permite que tu gato huela y lama la pasta dental. No te apresures.
Antes de introducir el cepillo, comienza acariciando suavemente las mejillas de tu gato y, poco a poco, levanta sus labios para exponer los dientes. Usa tu dedo para frotar levemente la encía. Recompensa con caricias, palabras suaves o una golosina felina.
Una vez que tu gato tolere el contacto, aplica una pequeña cantidad de pasta en el cepillo y realiza movimientos suaves sobre los dientes frontales. No es necesario abrir la boca completamente, basta con cepillar en la parte exterior de los dientes. Con el tiempo, puedes avanzar hacia los molares.
Consejo: Mantén las sesiones breves y positivas. Si tu gato se estresa, detente y vuelve a intentarlo al día siguiente.
Después de cada intento, ofrece algo que tu gato disfrute: un juguete, una golosina o tiempo de juego. Esto ayudará a asociar el cepillado dental con una experiencia positiva.
Cada gato es único y algunos requieren más tiempo para adaptarse. Si a pesar de intentarlo con paciencia no logras cepillarle los dientes, consulta con tu médico veterinario para explorar otras alternativas como productos enzimáticos, croquetas dentales o limpiezas profesionales.
El cepillado dental en gatos puede parecer un reto al principio, pero con una rutina amable, materiales adecuados y mucha paciencia, es posible convertirlo en un hábito beneficioso y libre de estrés. Cuidar la higiene bucal de tu gato no solo previene enfermedades, sino que también mejora su calidad de vida y longevidad.
Recuerda que cada pequeño avance cuenta, y lo más importante es construir una experiencia positiva entre tú y tu gato.
Si tienes dudas o necesitas asesoría personalizada sobre cómo mejorar la salud dental de tu felino, en Doctora Cats te podemos ayudar con recomendaciones profesionales adaptadas a tu compañero felino.
Copyright ©2021 Todos los derechos reservados
Desarrollado por ThePixelRocker